El tridente letal del Celta

Foto: Salvador Sas

El Celta confirmó en el arranque liguero lo que se intuía durante la pretemporada. La capacidad goleadora, y de generar peligro en área contraria se ha multiplicado con respecto a la pasada temporada, aunque ya en el tramo final de la competición el equipo comenzó a dar muestras de su "letalidad" ante el área contraria. Nolito y Orellana fueron los puntales del equipo en un final de temporada donde el equipo pasó de pelear por la permanencia a disputarle el puesto a todo un Valencia. 

Llegado el verano, el club vigués decidió reforzar la vanguardia con la llegada del ariete argentino Joaquín Larrivey, que el pasado curso anotó 12 goles, uno de ellos en Balaídos, y casi todos en la segunda vuelta. Larrivey debería pelear con Charles por un puesto en el once ideal, desplazando al brasileño de una titularidad que nadie le discutía el pasado curso. 

Durante los amistosos de preparación pudimos ver a este tridente mostrando todo su potencial, y en el primer partido de Liga se puso en práctica lo aplicado durante la pretemporada. Nolito, Orellana y Larrivey son un tridente letal, que amenaza a las defensas de la Liga. Ayer se repartieron escrupulosamente el botín goleador, con un tanto por barba, repartiéndose incluso la participación. Larrivey asiste a Nolito en el primero y Nolito le devuelve el favor en el tercero. El segundo se lo guisó y se lo comió Orellana, pero el hueco por donde entra el balón está libre porque Larrivey arrastra a un par de defensas con un inteligente movimiento. 

Los tres lidiaron contra la zaga getafense, acompañados de un centro del campo especialmente inspirado, con Álex López y Krohn-Dehli cubriendo las espaldas al tridente ofensivo. Por lo visto ayer, darán muchas alegrías a la parroquia viguesa a poco que mantengan el nivel mostrado en el primer partido de Liga. La apuesta de Berizzo por el ataque es clara, y estos tres futbolistas son la punta de lanza de un equipo muy cuidado en el aspecto de la estética futbolística. Los extremos, demoledores y desequilibrantes, y el ariete, fuerte y con calidad. Una combinación casi perfecta para el tridente letal del Celta.