Un test de resistencia, plato principal para el segundo día


Foto: La Voz de Galicia
Pablo Fernández, el nuevo preparador físico del Celta, está siendo el protagonista en los primeros días de pretemporada celeste.

El Profe Pablo Fernández, el nuevo preparador físico del Celta, está siendo el protagonista en los primeros días de pretemporada celeste. Si en su primer día de trabajo el argentino había programado desde ejercicios de comba a trabajo sobre esterilla pasando por el balón, ayer fue la resistencia la protagonista.

Con el equipo dividido en grupos, y sobre el campo de entrenamiento de porteros anexo al césped del filial, el preparador físico, Berizzo, Onaindía y Marcucci testaron la capacidad aeróbica de sus jugadores. Echando mano del test Course Navette -que recurre a señales sonoras- los futbolistas hicieron carreras de 20 metros progresivas según el ritmo marcado por una grabación y cuya velocidad se fue incrementando poco a poco.

El test pretende examinar la capacidad aeróbica máxima de un jugador y la capacidad para recuperarse de un ejercicio intenso, y servirá de referencia a Berizzo y a su equipo para conocer el estado de forma en el que llegan los futbolistas. Para controlar mejor a los jugadores, el cuerpo técnico dividió a la plantilla en dos grupos, citando a los primeros a las diez de la mañana y a los segundos una hora y media más tarde. Cabral, Fontás, Charles, Pablo Hernández, Borja Oubiña, Álex López, Larrivey y Krohn-Dehli fueron los encargados de abrir la sesión, siendo el danés el que pusiera el punto y final al ejercicio, con ovación de sus compañeros incluida.

«Hicimos test, pruebas para ver cómo estamos físicamente e ir viendo en qué tenemos que mejorar en fuerza, salto y resistencia, lo último que hicimos. El entrenador verá cómo estamos y de ahí seguramente sacará grupos para trabajar en pretemporada», comentaba al respecto Gustavo Cabral.

Kisluk, con los porteros

La prueba de resistencia se limitó a los jugadores de campo, puesto que los porteros ya trabajaron por primera vez a las órdenes de Carlos Kisluk, que toma el relevo de Nando al frente de los guardametas. El técnico argentino planteó diversos ejercicios a los cuatro metas -Yoel, Sergio, Rubén y Óscar Santiago- a los que también irá incrementando la exigencia poco a poco.

Por Lorena García Calvo para La Voz de Galicia

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