Oubiña ve "normal" su suplencia

Foto: Marta Grande

Borja Oubiña no es un futbolista acostumbrado al banquillo. El capitán celeste vivió, de hecho, el pasado lunes frente al Athletic su segundo partido como suplente en las cuatro temporadas que ha defendido la zamarra celeste en Primera División. Su anterior paso por la banqueta se produjo esta misma temporada, en la quinta jornada, ante el Villarreal en Balaídos y más que a una cuestión técnica hay que achacarla a la decisión de Luis Enrique de dosificar el esfuerzo con rotaciones en una semana de tres partidos.

Salvo en este puntual caso, Oubiña había iniciado sobre el césped todos los compromisos ligueros en los que había estado disponibles con todos los técnicos que le han dirigido en el Celta: 36 partidos en el curso 2005-06 con Fernando Vázquez, 30 en el 2006-07 con Vázquez y Stoichkov, y 36 la pasada campaña a las órdenes de Paco Herrera y Abel Resino.

Precisamente por esta falta de costumbre sorprende la naturalidad con que el capitán celeste ha asumido su suplencia del pasado lunes ante el Athletic. "No me sorprendió, es algo que forma parte del fútbol, puedes jugar o no jugar. Son situaciones normales de este deporte. Yo he tenido la suerte de jugar mucho", señala Oubiña. "(La suplencia) Forma parte del fútbol. Un futbolista tiene que estar preparado física y mentalmente para jugar o no jugar. Las decisiones luego corresponden al entrenador", concreta.

El buen desempeño de Krohn-Dehli en este último partido frente al Athletic como pivotes defensivo abre algunos interrogantes de cara el futuro. A pesar de que el nivel de juego de Oubiña ha estado por debajo del habitual en los últimos compromisos ligueros, la impresión es que la decisión de utilizar al danés como volante tapón ha sido más una elección táctica en función del rival -Luis Enrique ya había empleado a Krohn-Dehli con desigual éxito en los dos encuentros de la eliminatoria copera ante los vascos- que una declaración de intenciones.

Las palabras del técnico tras el choque -"tenía claro el once a pesar de que hay jugadores muy importantes para nosotros que no han jugado de inicio"- parecen corroborar esta hipótesis. Oubiña, sin embargo, no percibe que el cambio táctico vaya más allá de una mera cuestión de matices. "No es una novedad táctica, nosotros jugamos siempre del mismo modo y los que lo hicieron el otro día contra el Athletic nos hicieron disfrutar mucho y sacaron un buen punto para el equipo", apunta. Y precisa: "Cada jugador sí que es diferente, pero dentro de las características, porque siempre se buscan matices, todos los jugadores tenemos el conocimiento de lo que tenemos que hacer".

En todo caso, al capitán del Celta no le roba el sueño la posibilidad de repetir en el banquillo en El Madrigal. "Sólo me veo entrenando mañana", zanja cuando se le pregunta si se ve en el once que se medirá al Villarreal.

Julio Bernardo / Faro de Vigo