Más allá de que la situación del Celta en la tabla haga o no justicia con los méritos contraídos por el equipo, los resultados acumulados en esta primera vuelta que está a punto de finalizar evidencian la irregularidad del conjunto dirigido por Luis Enrique, una falta de consistencia que le ha llevado a los puestos de descenso casi en el ecuador del campeonato.
El Celta ha perdido más de la mitad de sus partidos (10 derrotas en 18 jornadas) y no puntúa en dos jornadas consecutivas desde las tres primeras semanas de competición, cuando encadenó dos empates como local ante el Espanyol (2-2) y el Granada (1-1) y una victoria en el campo del Betis (1-2) en el segundo partido del presente ejercicio.
Tras el mencionado buen inicio de curso, el Celta atravesó su peor racha de la temporada. Estuvo siete partidos consecutivos sin ganar y encajó cuatro derrotas consecutivas entre la sexta y la novena jornada, ante Getafe (2-0), Elche (0-1), Atlético (2-1) y Levante (0-1). Precisamente después de este último encuentro, los vigueses cayeron a la zona de descenso por primera vez (y única hasta este lunes) en la temporada.
El equipo protagonizó después una pequeña reacción con dos triunfos en tres jornadas, ambos fuera de casa ante el Málaga (0-5) y el Sevilla (0-1). Entre ambas victoras, en cambio, cayó en Balaídos contra el líder, el Barcelona (0-3). Tras ganar en el Sánchez Pizjuán volvió a perder, esta vez dos partidos seguidos, frente al Rayo (0-2) y la Real Sociedad (4-3). En las cuatro siguientes jornadas, puntuó en Balaídos y perdió como visitante: ganó al Almería (3-1), cayó en Valladolid (3-0), empató contra Osasuna (1-1) y perdió el lunes en el Santiago Bernabéu, resultado que le condenó a la antepenúltima posición por su diferencia de goles con respecto al Valladolid.
Precisamente, esos tres tantos encajados ante el Real Madrid convierten al conjunto de Luis Enrique en el cuarto más goleado de la categoría. El Celta ha recibido 30 goles en 18 jornadas, cifra que sólo empeoran el Rayo Vallecano (con 45 el más goleado con diferencia), el Betis (36) y el Almería (32). Con 30, como el Celta, está el Getafe.
Los números de los celestes en ataque parecen mejores. No en vano, hay nueve equipos que han marcado menos goles en las dieciocho primeras jornadas y un décimo, el Valladolid, que suma exactamente los mismos, si bien es cierto que el equipo vigués marcó prácticamente un cuarto de sus 21 tantos en un único encuentro, ante el Málaga (0-5) en La Rosaleda. En los otros diecisiete partidos, el Celta ha marcado 16 goles; esto es, menos de uno por encuentro, una media impropia de un equipo teóricamente ofensivo.
Borja Barreira / Atlántico Diario
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