![]() |
Foto: LFP |
Corría el minuto 55. Partido parejo entre ambos conjuntos que no podían realizar su mejor versión ante una climatología que no acompañaba. Diego Mariño, uno de los hombres del partido, aprovechaba la cercanía de Charles para propinarle un balonazo. Teixeira Vitienes, no se sabe si por la niebla, interpretaba la acción de manera distinta. El colegiado cántabro mostraba la segunda amarilla al delantero brasileño por impedir el saque del meta vigués. Era, sin duda, una de las jugadas desequilibrantes del partido.
Cinco minutos después, Javi Guerra cazaba un centro de Ebert y, a la media vuelta, ponía un remate que se convertía imposible para Yoel. También para Cabral, que no lograba cruzarse en el camino del disparo del ariete local. El Celta, a pesar de jugar en inferioridad numérica, era superior. Dominaba, pero no llegaba peligro. La climatología y jugar con uno menos volvían a ser dos obstáculos demasiado grandes para un equipo que sufrió, por segunda jornada consecutiva a domicilio, una expulsión.
Fuente: Faro de Vigo
0 comments:
Publicar un comentario