Hace unas semanas recordábamos los dorsales históricos del Celta, y a partir de este fin de semana recordaremos los dorsales malditos, aquellos que vistieron jugadores sin fortuna en el Celta, y que queremos someter a votación para que elijáis al futbolista bluff por excelencia que ha portado cada uno de estos dorsales desde la Temporada 1995-96.
Uno de los números malditos por excelencia en la historia reciente del Celta es el nueve. Desde que existen los dorsales fijos, varios han sido los "bluff" que han portado el mítico número que designa al goleador por excelencia, al delantero centro. Jugadores fichados para marcar diferencias, y que a la hora de la verdad no lo hicieron. Más bien al contrario. En este número tenemos una larga lista.
Claro ejemplo de fichaje obsesión tras destacar en un partido ante el equipo que lo ficha, en este caso durante una eliminatoria de Copa de la UEFA, mientras defendía los colores del Olympique de Marsella. Horacio Gómez no paró hasta contratarlo, y eso que su rendimiento en los años posteriores ya no fue el mismo. Al final logró traerlo a Vigo y decepcionó, anotando 2 goles en 11 partidos. Solo pasará a la historia por ser el verdugo del Celta en aquella famosa eliminatoria europea.
Uno de los grandes bluff de la historia del Celta. El ecuatoriano es un futbolista mítico, que sigue jugando todavía a pesar de sus casi 36 años, y que con el conjunto celeste tan solo disputó seis partidos en los que no anotó ni un solo gol. Cifras ridículas para un jugador por el que el Celta pagó 5 millones de dólares y que pasó a la historia por su desviada conducta extradeportiva y su afición a los amoríos, y no tanto por su rendimiento deportivo.
Otro de los grandes patinazos de Ramón Martínez en la época oscura del Celta en Segunda División fue este búlgaro que llegó al Celta para asegurar goles y no aseguró ni juego. Manchev llegó avalado por Stoichkov, quien a la hora de la verdad ni contó con él. Llegó gratis, menos mal, porque no llegó ni a tirar a puerta y a mitad de temporada regresó al Real Valladolid.
Uno de los primeros fichajes de Miguel Torrecilla fue Arthuro, que pasará a la historia por ser el autor del primer tanto que encajó el Celta en los cinco años de su travesía por el desierto de la Segunda División cuando militaba en Segunda División. Otro "verdugo" que tampoco rindió en el Celta. Después de fallar un gol clamoroso ante el Tenerife en Copa, se "vengó" de la afición llevándose la mano a las orejas tras marcar ante el Villarreal. Se fue del equipo unos días después.
El griego llegó para sustituir a Arthuro y, al menos, se ganó el favor de la afición, que ya es algo. En 26 partidos oficiales no fue capaz de marcar un gol, y eso que lo intentó casi todo, pero nada valía para perforar la meta contraria. Solo marcó en los amistosos, siendo el Ourense su víctima propiciatoria. Estuvo apartado media temporada antes de regresar a Grecia. Recientemente ha vuelto a ser llamado por la selección de su país.
0 comments:
Publicar un comentario