 |
| MANUEL R. SUÁREZ |
Las bandas celestes se han revitalizado. Si Augusto Fernández vive un momento de gracia, de Michael Krohn-Dehli podría decirse que ha recuperado la magia con la que convivió buena parte de la Liga y que se había diluido en sus botas durante algunos encuentros. El danés vuelve a ofrecer su mejor versión. Su movilidad, su capacidad para leer el fútbol y sus centros magistrales recobran el protagonismo, aunque él prefiere no hablar de baches. «No creo que haya recuperado mi mejor nivel, simplemente ahora estoy jugando. Es difícil estar a tu mejor nivel si no juegas», argumenta el internacional danés.
La pérdida de confianza es uno de los elementos a los que se aludía para justificar sus días más oscuros, y Krohn-Dehli no rechaza la idea. «Cuando no juegas, siempre pierdes confianza. Ahora estoy jugando de nuevo e intento hacerlo lo mejor posible», dice. Y esa confianza no afecta únicamente a los futbolistas, sino a todo el equipo, que ha visto cómo tras reconciliarse con el triunfo la fe en sí mismo ha aumentado. «Creo que habíamos perdido un poco de confianza, primero por los resultados y luego por el fútbol, pero ahora estoy contento porque estamos ganando cuando mejor jugamos».
En lo que va de campeonato el danés ha puesto su sello a seis asistencias, aunque la faceta goleadora se la ha resistido un poco más. El centro a Augusto en el campo del Levante fue solo un ejemplo de su fútbol. «Estoy contento de ayudar al equipo con la asistencia, pero sobre todo por haber jugado mejor todo el equipo. Eso nos transmite más confianza», asegura.
El modelo adelantado que Abel probó no era el más adecuado para el fútbol del danés, que ahora, en la vuelta a los orígenes, recobra protagonismo. «Si el equipo juega bien, yo juego bien», zanja. Al internacional celeste le gusta la imagen que el Celta ha dado en los últimos partidos, pero todavía cree que el equipo puede ir a más. «Creo que tenemos más nivel para dar. En la primera parte de Levante hicimos muy buen trabajo, aunque en la segunda sufrimos más porque en España no hay rivales fáciles».
Y si algo no ha faltado nunca en Krohn-Dehli es su implicación con el equipo, y en esta recta final, no iba a ser menos. «Siempre he dicho que soy optimista, pero ahora más. No va a ser fácil, pero tenemos que seguir luchando».
0 comments:
Publicar un comentario