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| Foto: Mykel - Tinta Amarilla |
El pasado martes tras ser sustituido por Oubiña, en algún periódico se dijo que el delantero había hecho un feo gesto al banquillo. Sin embargo, el talaverano lo niega tajantemente y ha mostrado su descontento ante dicha información. Por otra parte, ha mostrado su alegría por su buen inicio goleador al otorgarle mayor confianza y poder ayudar al equipo con sus tantos.
Sus número en este inicio de temporada son muy buenos, seis goles en diez partidos, igual que el año pasado pero en menos minutos de juego. Aún así David opina que “lo que importa es lo colectivo, el Celta está llevando una línea ascendente y mejorando en casa.” Ante el hecho de ser el máximo goleador le resta importancia: “Ser pichichi no me quita el sueño, pero es importante para mi confianza y para el equipo. Le doy más importancia a que cinco han sido el primer gol del equipo.”
La política de rotaciones llevada por Herrera es uno de los focos de atención de la semana. El ariete no niega su disgusto: “Cualquiera quiere jugar, a los jugadores en general no nos gustan las rotaciones. Pero es bueno para el equipo y parece que sientan bien.” A lo que quiso añadir el desmentido de un supuesto enfado por ser sustituido el martes: “No me enfade por el cambio del otro día, no es cierto. En otras ocasiones si lo he hecho, y he reconocido que está mal.”
El jugador que le sustituye en las rotaciones es Iago Aspas y se ha hablado de cierta incompatibilidad entre ambos: “En este equipo todos podemos jugar juntos porque somos jugadores con características distintas, pero el que decide es el míster.” Sobre si posible suplencia en Vila-Real no oculta su extrañeza: “Dolido no estaría, pero me parecería raro que con la dinámica tan buena que traigo no jugar.”
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