Tras el empate del Celta ante el Real Valladolid, Quique de Lucas comentó el partido. Para el catalán el Celta "hizo méritos para ganar", y el empate en el marcador se dio porque el Celta no supo "materializar las ocasiones", a pesar de que, en palabras del jugador celeste, el equipo lo hizo "todo bien": "A nivel ofensivo estuvimos bien, pero faltó meterla, que es lo que cuenta al final. Nos costó hacer el gol, pero merecimos la victoria".
Sobre la jugada del gol, De Lucas y Orellana se colocaron al lado del balón, e incluso el delantero catalán marcó el balón, dando a entender que sería el quién podría lanzar, algo que fue simplemente "una maniobra de distracción". De Lucas lo explicaba así: "Son distancias demasiado cortas para mí. Oímos que la barrera no iba a saltar, lo que es mejor para Orellana. El portero venía renqueante, con problemas físicos y no ve salir el balón. Fabián tiene un golpeo sensacional", explica De Lucas que cree que Orellana aporta "un desequilibrio importante. Los defensas tienen que estar encima de él".
Con respecto a su juego, Quique De Lucas se muestra satisfecho: "He intervenido muchísimo en el juego, más hacia el centro y resulta más difícil defender a un jugador con mayor verticalidad en horizontal, no solo en vertical. He jugado ahí toda mi carrera", apuntó.
De Lucas explicó que tras el gol del Valladolid, pensaron en el empate "como un mal menor. Un punto a día de hoy nos sabe mal, pero tal vez en el futuro sepa a gloria", aunque quiso dejar claro que si el Celta quiere estar arriba, no puede "dejar escapar más puntos de Balaídos"
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