Seis de treinta. Esa es la pírrica cifra del Celta en los últimos 10 partidos, que le ha llevado de ser líder de la categoría con 5 puntos de ventaja con respecto al tercer clasificado, a ver el ascenso directo como una auténtica utopía y la clasificación para los play-off en entredicho.
Lo ha hecho además igualando récords, como hay que hacer las cosas, de tal modo que esta racha es la peor de la década, igualando la vivida en la Temporada 2006-07, que acabó con el Celta descendido a Segunda División. 5 derrotas (Huesca, Villarreal B, Recreativo, Valladolid y Girona) y un empate ante la Ponferradina, colista de la categoría.
El registro es aún peor que el vivido por el equipo entrenado entonces por Fernando Vázquez, ya que en aquella racha se habían logrado 2 empates, sumando así 2 puntos de 18 posibles, mientras que en esta simplemente se ha sumado un punto.
La cifra es escalofriante y pone en duda las opciones del Celta en un hipotético play-off para el que aún hay que clasificarse. Uno puede ser todo lo positivo que se quiera, pero los hechos, tozudos, están ahí. O espabilamos, levantamos la cabeza y salimos ya de esta, o el sueño se esfumará.
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