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| Foto: Faro de Vigo |
La jornada del miércoles no pudo ser mejor para el Celta, que ha distanciado a dos rivales en la lucha por la clasificación europea. El Valencia cayó derrotado en Mendizorroza y ya no podrá alcanzar a los célticos, ya que tiene 45 puntos por los 52 del Celta, con tan solo 6 en juego.
Además el Mallorca cayó finalmente derrotado en el Santiago Bernabéu, a pesar de ir por delante durante muchos minutos, encajando el 2-1 en tiempo de descuento. Esta derrota deja al equipo de Jagoba Arrasate con 47 puntos, 5 menos que los celestes, que tienen ganando el goal-average particular.
Este jueves volvemos a tener dos partidos con intereses para el Celta, ambos a las 19:00: Osasuna recibe en casa al Atlético de Madrid, que no tiene prácticamente nada en juego, y el Rayo Vallecano recibe al Betis, que apura sus opciones de conseguir la quinta plaza que da derecho a jugar la Champions. Los andaluces necesitan ganar si quieren mantener alguna opción de disputar la máxima competición continental por clubes.
Si el Rayo Vallecano no gana al Betis, y Osasuna pierde con los colchoneros, la clasificación europea del Celta ya será matemática. Con esta combinación, el equipo de Claudio Giráldez, incluso perdiendo los dos partidos que le faltan, quedará como poco entre los 8 mejores de LaLiga, por lo que jugará matemáticamente la Conference League, quedando a la espera de lograr ante Rayo o Getafe los puntos necesarios para alcanzar la Europa League. Si el Rayo cae esta tarde, bastaría un punto en cualquiera de los dos partidos, mientras que si empate sería necesario que fuese precisamente ante los vallecanos.
En todo caso, ya habrá tiempo para echar cuentas cuando acabe la jornada de este miércoles. Tanto Rayo como Osasuna tienen compromisos complicados, pero son equipos que están firmando una buena temporada y pueden obtener buenos resultados ante cualquier rival. Lo cierto es que Europa está más cerca que nunca y pase lo que pase esta noche, seguirá dependiendo del Celta.
