Jornada de transistores en los estadios españoles. Al ser la penúltima jornada de Liga, es obligatoria la unificación de horarios para evitar que los equipos saliesen con ventaja a jugar sus encuentros. Aunque en el Celta mantienen que únicamente se centrarán en lo que ocurra en el césped del José Zorrilla, será inevitable que tengan un ojo puesto en lo que hagan Osasuna, Deportivo, Zaragoza y Mallorca, especialmente en el caso de los dos primeros, ya que los vigueses necesitan en caso de derrotar al Valladolid que uno entre navarros y coruñeses no gane su partido ante Sevilla y Málaga respectivamente. Además, un mal resultado de Zaragoza y Mallorca contra Betis y Atlético permitiría los célticos superar a ambos en la clasificación en caso de triunfo, facilitando las cosas de cara a la última jornada en caso de continuar con vida.
Osasuna-Sevilla
Osasuna se juega el todo o nada en su último partido como local de esta temporada en el estadio Reyno de Navarra, donde se enfrenta a un Sevilla con alguna opción de meterse en la Liga Europa, en un partido con aroma a final: permanencia o tragedia antes de acabar la Liga en el Bernabéu.
El conjunto pamplonés, aunque depende de sí mismo, no tiene margen de error en este partido, cuyo resultado se presenta casi definitivo para la suerte de un Osasuna que estará arropado por un Reyno lleno al haberse agotado las entradas.
El resultado del encuentro puede llevar casi al equipo de José Luis Mendilibar al descenso o todo lo contrario, ya que si Osasuna gana tendrá la salvación a tiro, con opciones de ser matemática mañana si pierde el Deportivo o no gana el Zaragoza, ambos a domicilio.
Málaga-Deportivo
El Deportivo se juega la vida en el intento de llegar a la última jornada dependiendo de su resultado para asegurar la permanencia y buscará así los puntos en La Rosaleda ante un Málaga que espera certificar su puesto europeo en un partido de despedidas, como la del técnico chileno Manuel Pellegrini.
El equipo malaguista podría incluso asegurar la sexta posición si el Betis, su perseguidor, empata o pierde en su campo con el Zaragoza, siempre y cuando consiga el triunfo frente al Deportivo.
El equipo coruñés aspira a hacer realidad el milagro en el que comenzó a creer el pasado mes de febrero con la llegada de Fernando Vázquez al banquillo, cuando parecía ya desahuciado.
El técnico contagió su energía positiva a la plantilla y el Deportivo tiene la esperanza de certificar la continuidad en la Primera División esta jornada.Por eso todos los integrantes del equipo han viajado.
Betis-Zaragoza
El Real Betis Balompié quemará su penúltimo cartucho, en sus opciones para participar la próxima campaña en competición europea, con la visita de un Real Zaragoza con "la soga al cuello" por su delicada situación en la tabla y que está obligado a ganar para mantener sus posibilidades de salvación.
El principal problema del conjunto aragonés es que ya no depende de él. La situación es compleja entre los seis candidatos al descenso y el escaso número de enfrentamientos directos en estas dos últimas jornadas hace que los zaragocistas estén obligados a puntuar.
En el peor de los escenarios, en caso de derrota y con los triunfos de Osasuna y Deportivo, los maños podrían acabar ya mañana siendo nuevo equipo de la categoría de plata.
Atlético de Madrid-Mallorca
Dos estados de ánimo chocan el domingo en el estadio Vicente Calderón, el festivo del Atlético de Madrid tras el título de Copa y de cierta ansiedad del Mallorca por su angustiosa pelea por evitar el descenso.
Con 32 puntos y penúltimo en la tabla, el conjunto mallorquín ya no depende de sí mismo, pero su técnico, Gregorio Manzano y los jugadores, han insistido esta semana en que apurarán al máximo sus opciones matemáticas, que pasan por ganar al Atlético y esperar.
Manzano, exentrenador de los "colchoneros", ha afirmado que el Atlético será un adversario "duro y complicado", que celebrará la Copa del Rey ante su afición, pero una vez el balón esté en juego, "irá a por los tres puntos".
