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| Foto: Juan Manuel Serrano Arce / Getty Images |
Tras dos días de descanso, el Celta retoma este martes el trabajo pensando ya en la final del próximo domingo (14:00) ante el Cádiz, donde se jugará algo más que tres puntos frente a un rival directo en la lucha por la permanencia. El conjunto amarillo cuenta con tres puntos menos en la clasificación, y en caso de vencer enviará al equipo de Rafa Benítez a puestos de descenso.
El técnico madrileño tendrá varias preocupaciones en la vuelta del equipo al trabajo. El partido ante el Barcelona, además de la derrota, dejó importantes consecuencias a nivel de lesiones. Tres futbolistas del Celta acabaron el encuentro con molestias. Carlos Domínguez tuvo que retirarse del terreno de juego en el descanso, y ya en la segunda mitad enfilaron el túnel de vestuarios Óscar Mingueza y Mihailo Ristic.
El serbobosnio es el que más preocupa, ya que se le vio llorando en el banquillo justo después de ser sustituido. Los tres serán evaluados este martes para conocer el alance real de sus dolencias, y confirmar si causarán baja de cara al partido del Nuevo Mirandilla. Se da la circunstancia de que los tres jugadores tocados son defensas, lo que puede provocar un grave problema para el Celta de cara a este encuentro, sobre todo teniendo en cuenta que Javier Manquillo ya no pudo jugar ante el Barcelona por problemas físicos, así que el madrileño será otro de los jugadores a los que los servicios médicos del Celta tendrán que evaluar.
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