Carvalhal empieza a dejar su marca en el Celta


Foto: LOF

El Celta se va pareciendo cada vez más a lo que aspira Carlos Carvalhal. El técnico luso reconoció antes del partido frente a Osasuna que no se podía hacer magia en tres días. En ese partido no pudo plasmar su idea. Se limitó a poner un once inicial que firmaría Eduardo Coudet, con un estilo de juego bastante similar. Con algún matiz, pero sin demasiadas variaciones. 

Con algún día más de trabajo, el Celta que salió al campo anoche en Vallecas ya se va pareciendo más a la idea que quiere plasmar el técnico luso en su nuevo equipo. De entrada salió con tres centrales y dos carrileros, un esquema en el que el técnico luso pone tanto empeño en negar que le gusta como los expertos en asegurar que es uno de sus favoritos. 

Con este sistema el Celta se protegía por dentro, defendía por acumulación y además también reforzaba las bandas, uno de los mayores peligros del Rayo Vallecano, y que Carvalhal tuvo muy en cuenta a la hora de elegir la formación inicial. Siendo resultadistas funcionó, aunque si la que saca Marchesín acaba en el fondo de las mallas, seguramente estaríamos hablando de un nuevo fracaso del preparador portugués. 

En todo caso, dado que el resultado fue el que fue, seguramente sirva para que el equipo recupere algo de confianza al dejar la portería a cero. Los goles encajados están siendo un lastre tremendo para este Celta, que antes de este encuentro había encajado 26 goles, dos de media por partido. Una auténtica sangría que ayer pudo frenar, porque además de no encajar, logró que un equipo tan peligroso como el Rayo Vallecano apenas inquietase la meta de Marchesín. 

La mejoría defensiva fue evidente, y nos quedamos con las ganas de conocer la respuesta ofensiva del equipo, aunque es complicado juzgar a un equipo que perdió a sus dos delanteros titulares por diversas causas. Aspas tuvo media hora, pero no estaba al cien por cien y se notó. 

Ahora tiene por delante más de un mes para prepararse para el siguiente encuentro de Liga. Los jugadores disfrutarán de unas pequeñas vacaciones tras el partido de Copa ante el Algar, y a partir de ahí dispondrán de una mini pretemporada para acabar de cimentar la idea de Carvalhal y llegar al partido ante el Sevilla con una idea mucho más reconocible. 

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