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| Foto: Jorge Landín / Atlántico Diario |
El Celta salió el pasado sábado con solo dos canteranos en su once inicial. Hugo Mallo y Iago Aspas, dos jugadores ya veteranos, fueron los únicos representantes de A Madroa entre las filas del equipo céltico, una situación poco usual en los últimos años, y que veremos con mucha frecuencia en el presente ejercicio.
Para entender lo inusual que es este dato basta con recordar que hay que remontarse a casi 12 años para encontrar una alineación con tan escasa presencia canterana, como recuerda hoy Faro de Vigo. Fue en concreto el 7 de noviembre de 2010, en un partido en Balaídos ante el Real Betis, con Paco Herrera en el banquillo. Aquel día salieron de inicio Hugo Mallo, que vivía su segunda temporada en el primer equipo, y Jonathan Vila. En el banquillo esperaban una oportunidad Yoel Rodríguez, Andrés Túñez, Dani Abalo y Iago Aspas. Solo Abalo tendría minutos.
El pasado sábado en el banquillo había varios canteranos, en una convocatoria mucho más larga que las que se permitían en 2010, pero tan solo uno de ellos, Gabri Veiga, dispuso de minutos. Si nada cambia, lo más probable es que este año jueguen Hugo Mallo y Aspas, y dispongan de minutos de forma esporádica el propio Veiga, así como Kevin y Carlos Domínguez. Si juegan otros canteranos será prácticamente de forma testimonial, salvo sorpresa.
La situación en Casa Celta ha cambiado mucho este verano. La presencia de canteranos se había convertido en una seña de identidad, pero las decisiones del club este verano nos han hecho llegar a uno de los peores momentos de los últimos años. Santi Mina, condenado por abuso sexual, Denis Suárez, castigado por Mouriño porque el Real Madrid se llevó a un alevín, y el traspasado Brais Méndez eran habituales el pasado curso y ya no estarán. Además se han ido cedidos Rubén Blanco y José Fontán, por lo que este año el celtismo no podrá sacar pecho por el número de canteranos en el primer equipo.
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