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| Foto: Cristina Quicler/Getty Images |
Este fin de semana el Betis visita Balaídos con un excéltico en sus filas: Borja Iglesias, un futbolista que a pesar de jugar solo dos partidos oficiales con el Celta, uno en Copa y otro en Liga, ha dejado un hondo recuerdo entre la afición por su excelente rendimiento en el filial, donde durante cuatro temporadas fue la gran referencia ofensiva.
El santiagués entró en la historia del Celta B convirtiéndose en el máximo goleador de su historia con 75 goles, una cifra difícil de superar en el futuro y que hará que se le recuerde durante muchos años entre el celtismo. Sin embargo, a pesar de esas grandes cifras y de la promesa realizada por Mouriño cuando le pidió que siguiera en el Celta B, no fue recompensado. En el verano de 2017 el Celta fichó a Maxi Gómez, cerrándole la puerta del primer equipo, por lo que decidió salir cedido al Real Zaragoza, donde completó una brillante temporada en Segunda Dvisión anotando 22 goles.
Al final de esa temporada, sin intención ninguna de volver al club, aceptó una oferta del Espanyol, que pagó 10 millones de euros por su fichaje, lo que estipulaba su cláusula de rescisión. Tras una buena temporada en Cornellá fue fichado por el Betis por unos 28 millones de euros. En su primera temporada las cifras fueron modestas, pero al año pasado anotó 11 goles, y en este ejercicio ya lleva 8 en Liga, y 15 si contamos todas las competiciones, convertido junto a Juanmi en el gran referente ofensivo de los verdiblancos.
Este domingo volverá a Balaídos, y nos gustaría anticiparnos y saber cómo será el recibimiento que le brinde la afición, en nuestra habitual encuesta de exjugadores. Agradecemos que además de participar en la votación, también argumentéis vuestra respuesta en los comentarios.
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