Aunque sigue perteneciendo al Celta, afortunadamente ya no volverá a Vigo. Emre Mor cumple su último año de contrato con el club vigués cedido en el Fatih Karagümrük, en la primera división turca, donde, como ya había hecho en Dortmund o en Vigo, está decepcionando por todo lo alto.
El exjugador céltico solo ha disputado 5 partidos con su nuevo equipo, para un total de 107 minutos, en los que no acumula ni goles ni asistencias, y la prensa turca ya se refiere a él como “decepción”, y asegura que “ha tocado fondo”, si es que este es posible para un futbolista que ha agarrado una carrera sin fin hacia los infiernos del fútbol, pasando de ser una promesa del fútbol europeo a un jugador incapaz de ser titular en un equipo de la zona media de la liga turca.
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