Daniel Wass está siendo uno de los grandes protagonistas en la pretemporada del Celta, y no precisamente por su rendimiento. El internacional danés se reincorporó más tarde al trabajo debido a su participación en la pasada Eurocopa, en la que alcanzó de forma brillante las semifinales del torneo con la “dinamita roja”.
Su intención era no volver a Valencia, pendiente de que se cerrara alguna operación para dejar el club de Mestalla, al que llegó hace tres temporada procedente del Celta, donde tuvo una salida mejorable. Como había hecho en aquella ocasión, a pesar de no tener nada cerrado con otro club, recogió todas sus cosas de A Madroa, esperando no volver.
Ha hecho lo mismo en Paterna, según cuenta la prensa valenciana, y en los últimos días se habla de su más que previsible salida al Olympique de Marsella, aunque por el momento no hay nada cerrado, y ha vuelto a entrenar con el grupo. El equipo francés ofrecer 1,5 millones de euros, una cantidad que en el club valenciano consideran claramente insuficiente para un futbolista que, al igual que hizo en Vigo, ha demostrado su regularidad y polivalencia domingo tras domingo.
Wass es un valor seguro que lleva once temporadas consecutivas jugando más de 30 partidos. Algo de lo que muy pocos jugadores pueden presumir, pero no le gusta estar demasiado tiempo en el mismo sitio, y ahora parece tener claro que su tiempo en Valencia ha llegado a su fin.
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