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| Foto: Ricardo Grobas/Faro de Vigo |
Desde la llegada de Óscar García el Celta ha experimentado una mejoría en todas sus líneas. Además del trabajo colectivo, hay jugadores que han crecido desde su llegada al banquillo. El ejemplo más claro de este crecimiento es Pione Sisto, pero tampoco es desdeñable la mejoría en futbolistas como Okay o Rafinha.
Pero el técnico catalán tiene una cuenta pendiente con Denis Suárez. El salcedano, fichaje estrella del Celta el pasado verano, acumula ya ocho partidos sin ser titular, e incluso teniendo en cuenta que alguna de estas ausencias estuvo motivada por una lesión, no es menos cierto que parece haber perdido totalmente el sitio en el equipo.
Y no lo tendrá sencillo para volver a jugar. Escribá lo veía como extremo izquierdo, pero ahí Óscar prefiere a Pione Sisto, e incluso a Brais Méndez, como se evidenció el pasado domingo. Y en su posición natural, en el centro del campo, Rafinha está intratable, y parece complicado que ambos compartan equipo.
El reto de Óscar, de aquí al final de la temporada, es buscar y encontrar un sitio para Denis, bien sea desde el once o aportando desde el banquillo. El Celta necesita su mejor versión para salir de la complicada situación en la que se encuentra en este momento.
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