¿Está este Celta y su afición preparado para luchar por la permanencia?

Foto: Sergio Reyes Robledo/EFE

Cuando comenzó la temporada, todos los jugadores y el cuerpo técnico del Celta apuntaban a Europa como único objetivo. Entre la afición tampoco se esperaba que la lucha fuese la permanencia, mucho más después de derrotar al Atlético de Madrid en la tercera jornada, situándose el equipo con 7 de 9 puntos posibles. 

Pero a partir de ahí la deriva ha sido preocupante. El Celta ha navegado permanentemente entre dos aguas, casi a una perfecta equidistancia entre los puestos europeos, que estaban relativamente lejos, y las plazas de descenso, que siempre han estado relativamente controladas. 

Pero la situación se ha precipitado en las últimas jornadas. El Rayo acumula 3 victorias consecutivas, justo en un periodo en el que el Celta ha perdido sus partidos, pasando de una ventaja de 11 puntos sobre los rayistas a los 2 que indica actualmente la clasificación. También el cambio de entrenador ha beneficiado al Athletic, que suma 5 de 9 en los tres últimos encuentros. Incluso el Huesca ganó, algo que no hacía desde la primera jornada. 

De repente el Celta se ha visto metido de lleno en la lucha por la permanencia. Acaba la primera vuelta con 21 puntos. Si es capaz de emular en la segunda rueda lo que ha hecho, no debería tener problemas para salvarse, pero cabe preguntarse si tiene el equipo adecuado para la agonía que es la lucha por la permanencia, con una plantilla excesivamente joven, con nula experiencia en estas lides, y con el entorno decepcionado porque el objetivo era otro bien distinto. 

En Vigo ya hemos vivido situaciones así en el pasado, las de un equipo con objetivos más ambiciosos que acababa cayendo a los puestos de descenso. El ambiente en Balaídos es horrible, caldo de cultivo perfecto para un final trágico. ¿Qué pasará si el Valencia se adelanta en el marcador el próximo sábado?. ¿Cómo responderá la afición y el equipo ante ese revés?. Los equipos que se salvan son los que se sobreponen mejor a estas circunstancias. ¿Seremos capaces de hacerlo?.  Vuelve pronto, Iago Aspas.