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| Foto: José Lores/Faro de Vigo |
El Celta regresa este lunes al trabajo muy pendiente de lo que pueda suceder con David Juncà, que el pasado sábado abandonó el césped con evidentes gestos de enfado después de sufrir un pinchazo. Las primeras exploraciones de los servicios médicos celestes concluyeron que se podía tratar de una rotura fibrilar en el bíceps femoral.
Este lunes se le realizarán pruebas complementarias para determinar el alcance de su dolencia. Por muy leve que sea la rotura, su presencia en el debut liguero ante el Espanyol está prácticamente descartado, y en función de la complejidad de la misma, podría quedarse fuera de circulación durante algunos partidos. Entre hoy y mañana el club anunciará el resultado de las pruebas y el tiempo estimado de recuperación.
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