Un año sin renovaciones urgentes


Foto: Alba Villar/Faro de Vigo
El Celta ha tomado este verano la drástica decisión de no seguir negociando con los jugadores que finalizan su contrato a un año vista, y ponerlos a todos ellos en el mercado, algo que hasta ahora no había hecho con ningún futbolista. Los beneficiados o perjudicados, según se vea, por esta decisión son Radoja, Jonny, Wass y Sergi Gómez. 

Hay otros jugadores que terminan contrato en 2019, pero su situación es diferente, ya que el Celta aún no ha tomado una decisión sobre su continuidad, y desde luego parece que no ha realizado hasta la fecha ninguna oferta. Se trata de Cabral y Fontàs, futbolistas a los que el Celta también facilitaría su salida, pero que cuenta con ellos para el próximo curso. 

De cara a este año, el Celta tendrá trabajo para renovar a sus futbolistas, pero será menos. Los jugadores sobre los que tendrá que trabajar son Sergio Álvarez, que ha firmado una renovación por un año, que se ampliaría automáticamente en caso de que el guardameta juegue una serie de partidos. En todo caso, la situación del de Catoira nada tiene que ver con las otras, ya que se trata de un jugador que siempre ha mostrado su compromiso y predisposición a seguir en el club, algo que no siempre le ha ayudado a nivel económico. 

El otro futbolista sobre el que existiría cierta urgencia es Facundo Roncaglia. El argentino termina contrato el 30 de junio de 2020, pero no sabemos si el Celta forzará una renovación, teniendo en cuenta que el zaguero tendrá para entonces 33 años, así que se aventura un año tranquilo en cuanto a renovaciones urgentes, aunque en Casa Celta se suele trabajar a más años vista, y seguro que se intenta llegar a algún acuerdo con alguno de los jugadores con contratos largos. 

0 comentarios:

Publicar un comentario