 |
| Foto: La Liga |
Cuando el Celta anunció el fichaje de Maxi Gómez, la web del club vigués lo definió como un “futbolista corpulento”. Evidentemente lo era, pero muchos consideraban que más allá de su complexión, estaba pasado de kilos. El jugador se entrenó en Uurguay intentando ponerse en forma y llegó a Vigo en buenas condiciones, que ha mantenido durante este tiempo.
Esta mañana reconoció que los hábitos alimentarios que practica desde su llegada al Celta son mejores que los que tenía en el Defensor Sporting: “En Uruguay no hacía las comidas que tenía que hacer y me sentía un poco pesado. Pero cuando vienes al mejor fútbol del mundo es obligatorio cambiar muchas cosas, y una de esas fue la alimentación con el nutricionista de aquí. Ahora como mucho más sano”, explicó el delantero.
Dessde luego, los nuevos hábitos le han sentado de maravilla a un jugador que llegó a Vigo siendo toda una incógnita y se está convirtiendo en uno de los delanteros más destacados del presente campeonato.
0 comentarios:
Publicar un comentario