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| Foto: José Jordan/Getty Images |
Claudio Beauvue está siendo uno de los cedidos que mejor está aprovechando su cesión. El delantero de Guadalupe salió rumbo a Leganés demandando los minutos que no le podía asegurar Juan Carlos Unzué en el Celta. Además lo hizo, según sus propias palabras, para jugar en su posición favorita: De delantero. Olvidándose de la banda, una posición en la que no se siente tan cómodo, según ha asegurado el propio futbolista.
El ex delantero del Olympique Lyonnais ha marcado dos goles y otro más en Copa, convirtiéndose en uno de los jugadores más peligrosos del equipo de Garitano, que está realizando una fantástica temporada en su segundo año consecutivo en la máxima categoría. De cara a este encuentro no podrá contar precisamente con Beauvue, ya que en el contrato de cesión se ha incluido la llamada “cláusula del miedo”, que impide que un jugador cedido se enfrente a su equipo en competición oficial.
Es una fórmula que el Celta ha sufrido en contra en numerosas ocasiones, cuando contaba con jugadores cedidos en sus filas, y que ahora también aplica cuando es el cedente. Balaídos se perderá el regreso de un futbolista bastante querido por su carácter. En Vigo sufrió por una lesión que le mantuvo durante 10 meses fuera de los terrenos de juego. En su regreso marcó un gol muy importante ante el Krasnodar, que permitía al Celta viajar a Rusia para la vuelta de la Europa League con una ventaja que sería crucial para superar el envite.
El próximo mes de junio regresará a Vigo. Veremos entonces si el Celta le puede garantizar minutos y cual es la decisión que tomará Unzué sobre un futbolista al que le ha faltado tiempo en Vigo para poder demostrar cosas.
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