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| Foto: LFP |
El Celta disputó ayer su primer partido sin luz natural, y con la cubierta de Río aún sin montar era un auténtico desafío cubrir la intensidad lumínica requerida para este encuentro. El Alcalde Abel Caballero, siempre tendente a la exageración, aseguró en la previa que la iluminación sería más que suficiente, pero la realidad es que el Celta tuvo serios problemas para alcanzar un mínimo en el día de ayer.
De hecho, según indican varios medios, entre ellos La Voz de Galicia, no fue así. Antes del encuentro se realizaron exhaustivas mediciones, y fueron varios los jugadores que protestaron por la baja intensidad lumínica durante el calentamiento, cuando incluso todavía era de día. Lo cierto es que la retransmisión televisiva no se vio afectada. Quizás no había el brillo de otros días, pero el partido se veía a la perfección.
No obstante, y nuevamente según La Voz de Galicia, el director del partido obligó al club a tomar medidas antes de comenzar el partido y de nuevo en el descanso, pero era difícil resolver el problema en ese momento. Al no alcanzar este requerimiento, la Liga podría proceder a sancionar al club con una multa económica, aunque este punto se conocerá probablemente en los próximos días.
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