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| Foto: Josep Lago/Getty Images |
El Girona sorprendió gratamente en su debut en la máxima categoría. En la primera jornada llegó a ponerse con un 2-0 a favor ante todo un Atlético de Madrid, que acabó igualando el encuentro en los minutos finales, y en la segunda jornada derrotó al Málaga gracias a un gol de Pedro Alcalá en el minuto 28. Aquel tanto valió los tres puntos ante el equipo andaluz, y es hasta la fecha el último que han marcado los catalanes esta temporada.
Desde entonces se han quedado secos en los cuatro partidos siguientes, logrando un punto de los 12 en juego. Perdió ante el Athletic en San Mamés (2-0), hizo lo propio ante el Sevilla de Berizzo en Montilivi (0-1), rascó un empate de Butarque (0-0) y perdió este fin de semana ante el Barcelona por un claro 0-3.
360 minutos sin marcar, más los 62 del partido ante el Málaga, los que van del minuto 28 al 90. En total son 422 minutos sin un gol que llevarse a la boca, lo que ha conducido al equipo rojiblanco a la decimoséptima posición, con un punto de margen sobre los puestos de descenso que ocupan Deportivo, con 4 puntos, Málaga con 1, y el Deportivo Alavés que aún no ha estrenado su casillero.
Y se enfrenta al Celta, que es el menos goleado de los de la zona baja, con la intención de romper esa racha negativa que le ha llevado a estar más de cuatro partidos sin poder celebrar un gol.
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