El Celta se mide a dos equipos con 50 horas más de descanso


Foto: Cristina Graña/Faro de Vigo
Los caprichos del calendario no solo perjudican a los espectadores, con los horarios estrambóticos establecidos por la Liga, sino que incluso pueden hacerlo directamente a los equipos de fútbol. Un buen ejemplo es lo que sucede esta semana con el Celta, perjudica doblemente al enfrentarse a dos rivales mucho más descansados. 

Mañana se mide al Getafe, que jugará este encuentro con una distancia respecto al último de 124 horas y 45 minutos, mientras que el Celta tendrá exactamente 72, es decir, con un descanso de 52 horas y 45 minutos más que el equipo vigués. El próximo domingo otro ejemplo. Los de Unzué jugarán 69 horas y media después de jugar ante el Getafe, mientras que el Eibar tendrá 119 horas entre el partido del Barcelona y el del Celta. Una diferencia también de 50 horas. 

Esta mañana Unzué prefirió no dar demasiada importancia a este hecho: “Es una ventaja para ellos, es obvio, no hace falta ser muy inteligente, pero las cosas son como son, los calendarios están ahí y no puedo hacer nada para cambiarlo y me centro en entender esta circunstancia y tomar las decisiones oportunas para que no se noten”, manifestó. 

Son aspecto estos que la Liga debería tener en cuenta, y una vez más viene determinado por el partido en abierto situado el lunes. Si ese partido hubiese sido el viernes se hubiese solucionado el problema, pero queda en evidencia que la televisión es mucho más importante incluso que la justicia o la competencia en igualdad de condiciones. 

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