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| Foto: RC Celta |
John Guidetti volvía a jugar con el Celta después de tres semanas de baja por lesión. Berizzo había marcado en rojo este día como el del regreso del ariete sueco, titular indiscutible en los últimos meses. El futbolista nórdico ha vuelto a repetir lo que hizo la temporada pasada, cuando empezó siendo suplente y acabó llegando al equipo titular gracias a sus buenas actuaciones.
Pocos dudan ahora del talento de Guidetti, un futbolista que es mucho más una canción y carisma. Ayer demostró que se trata de un gran delantero, con el mérito añadido de firmar un gran papel después de tres semanas de baja y apenas dos entrenamientos con el grupo. La falta de ritmo solo se notó en la segunda mitad, cuando el cansancio era evidente, momento en el que Berizzo decidió dar entrada a Beauvue en su lugar. El internacional por Guadalupe no estuvo inspirado.
Todo lo contrario que Guidetti, que en poco más de una hora dejó el equipo después de participar en los tres goles. Asistió con un sutil pase a Sisto en el primero, presionó al rival y forzó el error que aprovechó Aspas para robar un balón y marcar el segundo gol, y finalmente marcó el tercero con un gran disparo que sorprendió al meta belga. Poco más se le puede pedir a un jugador extramotivado para llegar a la final en su casa de Estocolmo.
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