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| Foto: EFE |
A pesar de que finalmente no fue decisivo, el Celta sufrió nuevamente los rigores arbitrales de Fernández Borbalán, que no vio dos penaltis en área del Getafe, ambos por mano. El primero de ellos, menos claro, lo cometió Juan Rodríguez mediada la primera mitad. Guidetti estaba al lado de la acción y protestó airadamente, sin fortuna, ya que Borbalán no entendió que era penalti.
Ya en la segunda mitad, Víctor se lleva el balón con la mano dentro de área propia. Es evidente que no hay voluntad en la acción, pero corta el balón de forma flagrante y se beneficia de ello. El colegiado del encuentro estaba situado en una posición inmejorable y ordenó que siguiese el juego, entendiendo que la acción no era ilegal.
Los jugadores del Getafe, especialmente Víctor, también reclaman penalti por manos de Sergi Gómez. Las distintas repeticiones no aclaran lo sucedido, aunque da la sensación de que golpea en el costado del catalán, que tenía el brazo totalmente pegado a su cuerpo.
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