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| Foto: Óscar Vázquez |
Diego Alende jamás olvidará el 5 de diciembre de 2015, el día de su debut en Primera con el Celta ante el Betis en el Villamarín. “Fue un momento muy especial, único. Debutar en Primera era un sueño que tenía desde pequeño. No me esperaba que fuera tan pronto, con 18 años y en ese partido tan difícil. Se dio la situación y estoy muy contento de haber cumplido un sueño. Allí no me lo esperaba. Estaba calentando, ni ví la expulsión de Jonny. De repente, me llamaron. Estuve un poco nervioso al principio, pero una vez que salí al campo los nervios fuera”, afirmó este lunes.
Repasó el partido al llegar a casa. “Era una experiencia nueva, un ritmo nuevo, jugar en Primera División. Tengo que seguir mejorando, intentar no cometer pequeños errores que hay al entrar en esta nueva división y aprender de lo que pasó”, comentó sobre su actuación. Cabral es su referente y el argentino estuvo muy pendiente de Alende sobre el campo: “En cuanto salí, me acomodó en el campo, no paraba de darme instrucciones. Tanto él como Hugo Mallo me estuvieron arropando durante los 40 minutos y gracias a ellos lo llevé mucho mejor, mucho más cómodo”. También tuvo palabras de agradecimiento para Berizzo. “Me dijo que enhorabuena con el debut, que siguiera trabajando con los pies en el suelo. Tiene toda la razón. Es un premio que me ha dado, aportó confianza en mí y se lo agradezco”, señaló la promesa celeste.
marcosblanco@moiceleste.com
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