Foto: Marta Grande
En el balance de Ernesto Marcucci, ayudante en el cuerpo técnico de Berizzo, desde que llegó a Vigo para afrontar la temporada 2014-2015 hay un partido que sobresale sobre el resto. Probablemente, no sea ninguno de los que todos estamos pensando. Se trata de la victoria por 2-0 ante el Atlético de Madrid en la jornada 23 de la pasada Liga. "Fue un partido en el que rozamos la perfección", señala.
"Fue un partido ideal por el momento en el que venía el rival y en el que veníamos nosotros para terminar de salir de esa racha adversa. Para mí, ese partido fue un poco el reflejo de lo que nosotros aspirábamos y aspiramos como equipo. El Atlético era un equipo durísimo, con jugadores muy buenos, de muchísima calidad y un entrenador de la talla de Simeone reconoció que el Celta le había ganado en todas sus variantes", apunta Marcucci.
No obstante, también recuerda con cariño los triunfos ante el Barcelona (el 0-1 a domicilio de la temporada pasada y el 4-1 en esta Liga) y los dos derbis gallegos con victoria en el último campeonato. Recordemos aquel Celta-Atlético de Madrid. Los célticos habían terminado con su crisis de resultados y demostraron lo que se avecinaba en el tramo final del campeonato. Los goles llegaron en la segunda mitad. Marcaron Nolito, de penalti, y Orellana, culminando una gran jugada colectiva.
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