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| Foto: Ricardo Grobas |
Publica en el día de hoy La Voz de Galicia una noticia sobre la Operación Patos, y en la que se sitúa al constructor Enrique Alonso Pais como un auténtico conseguidor de obras públicas gracias a su influencia sobre políticos y funcionarios. Y también sobre directivos del Celta. Uno de los últimos grandes contratos que se adjudicó fue la primera fase de la consolidación estructural en el estadio de Balaídos, obras realizadas en la grada de Río por un importe de 1.135.016 euros.
La junta de gobierno del Concello de Vigo anunció en diciembre la licitación a Stradia Infraestructuras y GPD Construcciones. Las escuchas telefónicas realizadas a los implicados en la gestión de esta obra hacen pensar a la instrucción judicial que existen muchos indicios “de las influencias ejercidas por Alonso Pais, tanto en los directivos del Celta como en los del Concello de Vigo, que han sido determinantes para lograr la adjudicación final de las obras”.
La investigación apunta que para asegurarse la adjudicación de las obras de Balaídos compró a la empresa Hormigones Valle Miñor, de la que forma parte el directivo del Celta Ricardo Barros, y de la que fue gerente el concejal Ángel Rivas, imputado en el caso Hormigón, el suministro de cemento para la obra en la avenida de Lugo, adjudicada por el Concello de Pontevedra.
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