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| Foto: Getty Images |
La sentencia de la FIFA sobre el espinoso asunto de los menores fichados por el Barcelona pone un pequeño punto de cordura sobre una auténtica locura como ha sido el fichaje de jovenes o muy jóvenes talentos futbolisticos. Esa sentencia viene a parar un poco los pies a los poderosos, a los de siempre, que se han dedicado en los últimos años a sondear todos los clubs de Europa, Sudamerica y aledaños buscando "mirlos blancos" tirados de precio. Aunque estos sean unos imberbes o casi preadolescentes con poco o muy poca capacidad legal de decisión. Pero para eso estaba el recurso de "embadurnar" a la familia. La ética se la come el dinero.
Y los Detalles como los de Dennis Suarez (vendido por auténtica necesidad ) o la venta de otros muchos jóvenes como si se tratase de un putrefacto mercado de trata de seres humanos no hacen si no evidenciar que algo está marchando mal en el fútbol mundial, por lo menos a nivel moral. ( De lo otro ya tenemos sobrados ejemplos con la UEFA y FIFA apolilladas y podrídas por la corrupción, y si no lo creen, miren el proceso de asgnación de Brasil y Qatar como organizadores mundialistas)
Sin duda el siguiente paso del Barcelona será el recurrir al TAS, donde probablemente puedan pedir favores y hacer tensión hasta cierto grado. Habrá amenazas, clamores por la injusticia, pactos en la sombra y rebajas. Pero la sentencia no deja de poner un pequeño, diminuto, punto limpio en medio de un desierto de excrementos. A fin de cuentas la FIFA está para esto. Para eso se le paga por parte de los clubes, los federados, las federaciones y el propio mundo del fútbol . Y mucho. El TAS será otra cosa.
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