Cinco puntos se le han escapado al Celta en los últimos minutos esta temporada. Con ese botín, el equipo de Luis Enrique estaría situado en la mitad de la tabla, a ocho puntos de los puestos de descenso. Regalos como los que concedió el sábado al Espanyol en Cornellá le obligan a afrontar la próxima jornada con más presión de la deseada. Los célticos necesitan una victoria el viernes (Balaídos, 21.00 horas) ante el Betis, que es colista, para evitar meterse de nuevo en el lodazal.
Estas concesiones de última hora del Celta empiezan y acaban, por el momento, en el Espanyol. En la jornada inaugural del campeonato, el conjunto catalán se llevó un empate de Vigo (2-2) después de ir perdiendo por dos goles de diferencia. Los periquitos también aprovecharon una jugada en la recta final del partido que abría la segunda vuelta para sumar más puntos de los que habían merecido ante los de Luis Enrique.
En un partido sin ocasiones de gol en ambas porterías, los blanquiazules se llevaron todo el botín. En esta ocasión, Sergio García estuvo más espabilado que Andreu Fontás y Gustavo Cabral en un balón colgado al área de Yoel, que nada pudo hacer ante el remate del delantero espanyolista. Era el minuto 87 de partido. No hubo tiempo para arreglar la avería y los celestes se volvieron a casa de vacío, como les ha ocurrido en diez ocasiones más esta temporada.
Al equipo de Luis Enrique no se le dan bien las segundas partes, pues es en ese periodo de los partidos donde sus jugadores se muestran más imprecisos. Más de las dos terceras partes de los 32 goles que ha encajado en las veinte jornadas de Liga llegaron después del descanso. En concreto, 23 tantos ha encajado Yoel durante el segundo tiempo.
Esta dinámica negativa se acentúa desde hace varias jornadas. De los últimos once goles que ha encajado el Celta a domicilio en sus últimos cuatro desplazamientos, diez han sido tras superarse el ecuador del partido. Aparte del recibido en Cornellá, la Real Sociedad, el Valladolid y el Real Madrid lograron tres aciertos cada uno contra los célticos durante el segundo tiempo. En el Nuevo Zorrilla y en el Bernabéu, así como el sábado ante el Espanyol, los célticos se fueron al descanso con una prometedora igualada a cero. Pero en la reanudación se esfumaron sus aspiraciones de sumar algún punto lejos de Balaídos.
Desde la victoria en el Sánchez Pizjuán ante el Sevilla (0-1), el Celta acumula cuatro derrotas consecutivas a domicilio. En ese caso, los de Luis Enrique han roto la buena dinámica que les llevó a sumar más puntos como visitante que como local. La tendencia ha cambiado y al concluir la primera vuelta del campeonato el equipo gallego sumaba ya más puntuación en casa que fuera: diez frente a nueve.
Su balance en casa se vio afectado, sin embargo, por los partidos que se le torcieron en los minutos finales. Esta tendencia negativa la estrenó en el primer partido de Liga. Álex López y Charles habían puesto la victoria al alcance de la mano de los célticos. Pero se dejaron sorprender por el Espanyol, que celebró su segundo tanto en el minuto 75. Thievy privó al Celta de su primera victoria del curso.
El mismo desenlace se repitió en la visita del Granada a Vigo. Rafinha abrió el marcador y Piti estableció la igualada en el minuto 61 sin que el Celta pudiese reaccionar a ese golpe.
Dolorosa fue la derrota ante el Elche, que aprovechó un error tras superarse la hora de juego para conquistar los tres puntos de Balaídos. Aunque la palma se la llevó el duelo con el Levante, que en el minuto 88 aprovechó un rechace para superar a Yoel y deshacer la igualada sin goles.
En Anoeta, los célticos se vieron por delante en el marcador por 1-3. La Real Sociedad aprovechó la expulsión de Fontás y los errores arbitrales para voltear el resultado. Igualó en el minuto 78 y en el 80 cerró la victoria (4-3). Vela firmó el póquer de goles.
Desde entonces, el Celta no había sufrido golpes tan dolorosos, a pesar de que en Zorrilla y en el Bernabéu acabó goleado (3-0) tras alcanzar el descanso con un empate sin goles.
El sábado ante el Espanyol, el equipo gallego tenía al alcance de la mano una igualada a cero, en un partido trabado y sin fútbol en las áreas. Pero se atragantó con el gol de Sergio García en el minuto 87.
Jaime Conde / Faro de Vigo
0 comments:
Publicar un comentario