Minuto 29 de juego del partido Celta-Granada. Era todavía agosto; el día 31, para más señas. Álex López recoge el balón al borde del área tras una acción iniciada en la banda izquierda. Abre el juego hacia la derecha, donde aparece Augusto Fernández para colocar el balón en el corazón del área. Allí, Rafinha llega para anotar.
Ése fue el último gol del Celta que han podido presenciar los aficionados en Balaídos. Los meses de septiembre y octubre se deslizaron por el calendario sin que tal suerte se repitiese sobre el Lagares. Nada menos que 421 minutos de fútbol sin poder celebrar un gol.
Pasó primero el Villarreal y el empate sin goles final se dio por bueno, visto lo visto sobre el campo en el probablemente peor encuentro del Celta esta campaña en casa. Pero después las cosas empeoran al encajar tres derrotas consecutivas ante Elche, Levante y Barcelona. Especialmente dolorosas fueron las dos primeras, ambas por el mismo marcador 0-1 y ante dos rivales directos.
Atlántico Diario
0 comments:
Publicar un comentario