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| Foto: Jesús de Arcos |
Dura semana para el Celta en cuanto a problemas físicos. Si a principios de semana las molestias afectaron a la portería, hoy fue Toni, uno de los indiscutibles de Luis Enrique, quien se resintió a causa de una mínima elongación en el adductor de su pierna derecha que, en principio, no debe impedir que participe en el choque ante el Levante. El coruñés trabajó en el gimnasio y posteriormente subió al campo de entrenamiento aunque sólo para hacer carrera. Según el parte médico facilitado por los galenos del club se espera que mañana realice trabajo individual con vistas a que el sabado y el domingo entrene con normalidad.
En cuanto a Rubén Blanco, continúa con el entrenamiento progresivo con el grupo, mientras que Yoel sigue pendiente de la evolución del esguince en su tobillo izquierdo. Las próximas horas serán claves para determinar si podrá estar ante el Levante.
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