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| Foto: EFE |
El Celta emitió las peores señales de la temporada en un partido en el que Luis Enrique Martínez revolucionó el equipo titular y que se decidió en dos saques de esquina mal defendidos por el equipo vigués. La acumulación de partidos esta semana llevó al técnico a introducir siete cambios en el once inicial y el conjunto celeste incidió en sus errores habituales pero no mostró ninguna de sus virtudes.
UN ONCE REVOLUCIONARIO
Luis Enrique Martínez sorprendió a propios y extraños con un once nada previsible. Sólo repitieron cuatro jugadores con respecto al choque del pasado domingo contra el Villarreal ?Yoel, David Costas, Aurtenetxe y Rafinha? y debutaron como titulares Bellvís, Levy Madinda, Orellana y David Rodríguez, mientras que Cabral recupero su sitio en el centro de la defensa tres partidos después.
MÁS GALLEGOS EN EL GETAFE
Por primera vez en muchos años, el Celta se enfrentó a un rival que, de inicio, alineó más gallegos (cuatro) que el conjunto vigués (tres). Yoel, David Costas y Borja Oubiña defendieron la camiseta celeste ?ayer roja y blanca? frente a un Getafa que salió con Roberto Lago, Borja Fernández, Mosquera y Diego Castro.
LESIÓN DE BELLVÍS
No tuvo suerte Carlos Bellvís. El lateral valenciano jugaba su primer partido de la temporada y estuvo poco más de un cuarto de hora sobre el campo. Al intentar llegar a un balón aéreo, su cabeza chocó con la de Diego Castro y el céltico se llevó la peor parte. Tuvo que ser sustituido por Jonny, que también se estrenó con Luis Enrique.
SIN SALIDA DE BALÓN
Pese a los cambios, el Celta mantuvo su fórmula habitual para intentar salir con el balón jugado desde atrás. Borja Oubiña retrasó su posición en el comienzo de cada ataque, pero finalmente eran Cabral o David Costas quienes debían iniciar las acciones, con nulos resultados. Las pérdidas de balón se multiplicaron en muchas fases del encuentro.
DOMINIO ESTÉRIL DEL GETAFE
El Getafe tampoco hizo un gran partido, pero en los primeros minutos encerró a los célticos y a los cinco minutos ya había botado tres saques de esquina, una suerte que acabaría siendo decisiva.
LA IMPORTANCIA DEL CÓRNER
Un partido sin apenas ocasiones se acabó decantando para el Getafe a balón parado. El Celta mostró una vez más su candidez en este tipo de jugadas y los locales sólo necesitaron dos saques de esquina, al final de la primera parte y al comienzo de la segunda, para llevarse la victoria. Pedro León se encargó de lanzar y Lisandro López primero y Arroyo después remataron ante la pasividad de la zaga céltica.
CAMBIOS SIN SUERTE
La revolución en el once dio lugar de nuevo a un banquillo con recambios de calidad, pero las sustituciones no aportaron nada al llegar con el partido decidido. Santi Mina entró por Rafinha, muy desafortunado ayer, y puso empeño pero poco más. A veinte minutos del final, Álex López suplió al danés Krohn-Dehli, pero tampoco pudo hacer gran cosa en un equipo entregado ya a su destino.
LAS PEORES SEÑALES
El de ayer fue seguramente el peor partido del Celta en lo que va de temporada y ante un rival que no tuvo que esforzarse demasiado. El equipo vigués acumula cuatro jornadas seguidas sin ganar y sólo ha logrado hasta ahora una victoria, por lo que el choque del domingo frente al Elche cobra una importancia todavía mayor. Al menos, Luis Enrique tendrá frescos a algunos de los puntales del equipo.
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