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| Foto: Marta Grande |
Dentro de una semana, Yoel Rodríguez cumplirá 25 años. Y hace apenas dos días, cumplió su sueño de debutar en Primera División, además en las filas de su equipo de siempre, el Celta. El vigués fue el elegido por el técnico celeste, Luis Enrique Martínez, para ser el titular en el primer partido del año dentro de la terna de guardametas de la primera plantilla que completan Sergio Álvarez y Rubén Blanco.
Yoel reconocía ayer, menos de 48 horas después del encuentro, que 'tenía ganas de que llegara el día y por fin llegó'. En la charla previa el choque conoció de boca del entrenador su titularidad y asegura que no le sorprendió: 'No es que me lo esperase o no, sino que tenía la ilusión de que sucediese'.
Tras el choque contra el Espanyol, la del 19 de agosto ya no será una fecha más en la vida del portero. 'Ya no solo para mí sino para mi familia, que estaba en el campo, y para todos mis amigos será un día marcado. También es el mes de mi cumpleaños. Parece que agosto es un mes bueno para mí', considera Yoel, satisfecho de estar haciendo su agosto particular.
Porque el camino hacia el debut no fue fácil e incluye tener que haberse marchado cedido al Lugo el verano pasado tras el ascenso sin probar las miles de la Primera División: 'Irme ya no era un golpe duro por lo futbolístico, sino por marcharme de mi ciudad, de estar con mi familia y con mi gente. Al principio me costó un poco. Pero tuve la suerte de que no fui muy lejos. Tenía muchas ganas de que llegara este día. El debut me hace estar muy feliz'.
En los momentos previos, asegura el canterano celeste, no sintió más presión de la habitual. De hecho, considera que una de sus principales cualidades es la sereniedad. 'Si con algo tengo que describirme es porque intento estar lo más tranquilo posible tanto dentro del campo como en cada entrenamiento. Es algo que me caracteriza, estar lo más sereno posible. Por eso, en el momento del debut, ilusión mucha, pero presión ninguna', señala.
'Me sentí bien en la portería'
A lo largo del partido, Yoel tuvo que intervenir en un puñado de ocasiones y no pudo evitar los dos goles anotados por el Espanyol. A su modo de ver, su actuación estuvo a la altura de la del resto del equipo. 'Me sentí bien en la portería. Intenté estar a mi mejor nivel, que es lo que intento siempre. El partido fue bueno ya no sólo por mí, sino por todos mis compañeros. Un encuentro bastante completo', concluye.
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