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| Foto: Jesús de Arcos |
Con dolor de hombros por el duro ejercicio que supuso la mañana dominical de rafting, arrancaron ayer los jugadores del Celta una nueva semana de trabajo en Melgaço. La sesión matinal, que se prolongó por espacio de dos horas, incluyó por segunda vez en lo que va de pretemporada una parte de preparación física. Durante media hora, aproximadamente, los jugadores realizaron carreras cortas en un pequeño circuito instalado en una de las bandas del campo de entrenamiento. Después, volvió el balón, con rondos, partidillos y acciones de ataque y defensa. El toque con velocidad y la presión asfixiante al rival son dos de las propuestas de Luis Enrique para un equipo que ya siente ganas de competir, tras cumplir dos semanas de entrenamientos, primero en A Madroa y desde el pasado viernes en el Centro de Estágios de Melgaço.
En las instalaciones deportivas de esta localidad fronteriza, el Celta volvió a entrenar en la tarde de ayer. De todos los que fueron incluidos en esta concentración solo faltaron Bermejo, que sigue recuperándose a parte por su lesión de rodilla, y Jota Peleteiro, con permiso del club para atender "asuntos personales".
El lunes de la semana que viene se incorporan a la pretemporada Jony, David Costas y Santi Mina, que tuvieron que atender compromisos internacionales. El último en sumarse al grupo será Rubén Blanco, que participa con la selección española sub 19 en el Europeo de Lituania.
Javier Conde / Faro de Vigo
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