![]() |
MARTA G. BREA |
Amante del boxeo, al que espera dedicarse cuando abandone el fútbol, el argentino Gustavo Daniel Cabral (Isidro Casanova, La Matanza, 14 de octubre de 1985) ha encajado bien su suplencia ante el Valencia, contra el que libró intensos derbis en su etapa en el Levante. Reconoce que "ante la situación tan delicada" del Celta deben evitarse los problemas en el vestuario. Cabral defiende la continuidad de Paco Herrera como técnico del equipo vigués, pues cree que el cambio de técnico casi nunca funciona y cree que "las culpas" están repartidas. El central céltico espera que su equipo inicie una buena racha de resultados el sábado ante el Getafe. Asegura que al equipo le dolió más perder contra el Valencia que ante Osasuna.
- Comentaba el otro día en una entrevista en Celta TV que le gustaba mucho el boxeo. ¿Lo ha practicado?
- Sí, me gusta mucho. He entrenado un poquito, casi nada. Me gustaría seguir pero no es compatible con el fútbol. Siempre me gustó el boxeo. Lástima que no he podido subir a un ring, pero me gustaría tener una oportunidad cuando me retire del fútbol, como aficionado.
- ¿Y qué duele más, un golpe en la mandíbula o ser suplente en un partido de fútbol?
- Creo que duele más un golpe en la mandíbula (risas). El tema de la suplencia es doloroso porque venía jugando, pero se entiende. El míster trata de buscar la mejor opción y en este caso ha decidido dejarme en el banco y yo lo he tomado de la mejor manera posible. Es lógico que uno se sienta fastidiado, pero lo acepto y sé que tengo que seguir trabajando durante la semana y tratar de ganarme otra vez la confianza o lo que me falta para que el míster me vuelva a poner en el once.
- Oubiña no estará el sábado en Getafe, por sanción. ¿Se ve de nuevo como mediocentro?
- No sé, la verdad. No me sentí cómodo en el partido de Pamplona y se vio que no jugué bien. Lo he sentido así, pero fue jugando de doble pivote. La primera vez que jugué ahí lo hice solo, ante el Rayo Vallecano. Ese día me sentí un poco más cómodo. Pero esta vez, en Pamplona, me he sentido incómodo y creo que se vio reflejado. Pero si el míster decide apostar por que juegue otra vez ahí, trataré de rendir al máximo. Vine aquí a sumar, tanto dentro como fuera del campo, en el banco o en la grada. Voy a tratar de aportar mi granito de arena, ayudar a los compañeros porque en esta situación tan delicada que estamos pasando lo que menos interesa es traer problemas. Y eso es lo que intento hacer: si el míster decide ponerme ahí no daré problemas. Lo único que digo es que mi posición habitual es de central.
- ¿Le dolió no jugar contra el Valencia, rival de su exequipo, el Levante, ante el que disputó intensos derbis?
- El hecho de no jugar ya me dolió y sobre todo por lo que significaba para mí un partido contra el Valencia. Pero no fue solamente dejar de jugar contra un gran equipo, sino también por la situación que está viviendo el Celta: teníamos que ganar para estar un poco mejor en la clasificación. No me tocó jugar y encima perdimos. Desde el banco, uno se muere de rabia por no poder ayudar al equipo.
- ¿Y una derrota así es como un KO inesperado?
- Es un golpe muy bajo en un partido en el que el Celta estuvo muy serio. Te da mucha rabia que te metan un gol en el minuto 93, por todo el esfuerzo que ha hecho el equipo, porque jugábamos en casa y porque un punto al menos nos servía para seguir sumando. Habernos quedado con las manos vacías no nos gustó.
- ¿Cómo ve al Celta? ¿Le parece que podría estar grogui?
- Siempre dije que tenemos una gran plantilla, con jugadores jóvenes con mucha proyección, pero nos cuesta ganar. Llevamos una racha negativa, donde las cosas no nos están saliendo como queremos. Ojalá que contra el Getafe sea el punto de partida de una buena racha.
- ¿Cuándo vio peor al Celta: tras perder contra Osasuna o el Valencia?
- Las dos derrotas nos dolieron mucho. En Pamplona jugamos mal, entonces era lógico que perdiésemos. No es la misma sensación que cuando juegas bien y pierdes. Con el Valencia, jugamos bien, hicimos un partido serio, y que nos hagan un gol de esa forma en el último minuto... Duele más porque, aparte, se produce en casa.
- La mayoría de equipos que están metidos en problemas de clasificación han decidido cambiar de entrenador. ¿Cree que el Celta puede tomar ese mismo camino?
- No creo. Cambiar de entrenador a veces sirve y otras no. Lo positivo en este caso es que Paco Herrera conoce a todos los jugadores. De esta situación tenemos que salir todos los que estamos ahora. Echar al míster sería fácil, pero él no tiene todas las culpas de la situación, es de todos: jugadores, dirigentes y cuerpo técnico. Pero siempre tiene que dar un paso al frente el míster y en eso yo no estoy de acuerdo. En este momento, para mí, lo mejor es que se quede el míster porque estamos trabajando duro y en cualquier momento va a cambiar la situación.
- Siguiendo con el boxeo, ¿se imagina a Herrera tirando la toalla y abandonando la pelea?
- No lo veo. A Herrera lo veo muy convencido de que tiene un gran plantel. Nosotros tenemos que cambiar en algunos aspectos, pero creo que el equipo va a salir adelante. Él tiene mucha fe en nosotros y nosotros en él, así que es cuestión de empezar a ganar y cuando el equipo coja confianza seguramente podrá salir de esta situación.
- ¿Y quiénes son sus ídolos en el boxeo?
- Mohamed Alí, que fue un gran boxeador. Ahora hay muchos: Manny Pacquiao, Maravilla Martínez, Miguel Cotto... Tampoco me quiero olvidar de Tyson. Tengo juegos de boxeo en el teléfono móvil y cada dos por tres estoy jugando.
Javier Conde / Faro de Vigo
0 comments:
Publicar un comentario