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| JORGE LANDIN |
El cuerpo técnico del Celta puso en práctica una especie mini pretemporada, que se desarrollará durante un mes y medio para cargar las pilas a la plantilla con el objeto de llegar lo más enteros posible a la recta final de la temporada. Por eso los celestes doblan sesión una vez por semana, programan algún partido amistoso, inciden en el apartado físico y repasan los conceptos tácticos más susceptibles de mejora. Herrera y su grupo de colaboradores lo pusieron en práctica en sus dos años anteriores en Vigo y han decidido mantener la idea en el retorno a Primera División.
«Metemos un poco más de intensidad y un poco más de carga de trabajo para llegar a final de temporada un poco mejor. Simplemente cargamos un poco más de volumen, le echamos un poco más de gasolina al coche para que tarde más en vaciarse. Es algo más del preparador físico, aunque todos consideramos que es importante», comenta Ángel Rodríguez, el segundo entrenador del Celta.
Con mucha carga de partidos encima, algunos jugadores llegaron tocados al parón de Navidad y de regreso, la Copa del Rey no permitió recuperar la frescura que necesita un equipo como el Celta. Tras la eliminación se ha activado el plan. Esta semana el equipo solo descansó el domingo (que se aprovechó para viajar) y ayer por la tarde ya volvió al tajo con una eminente sesión física. Para hoy está previsto programa doble y el resto de la semana habrá un entrenamiento por día. «Hacemos un poco más de trabajo físico, pero sin ser algo excesivo», puntualiza el ayudante de Herrera. Lo mismo sucede con el apartado táctico: «Siempre es bueno recordar cosas y mejorar algunos aspectos que de alguna manera se estaban haciendo de una manera que es mejorable». El cóctel se completa con algún partido amistoso para tener alerta a aquellos futbolistas con menos minutos en encuentros oficiales. «Creo que es importante jugar partidos entre semana para que aquellos que no vienen disputando tantos minutos no pierdan la forma y no pierdan el ritmo de competición. Es algo que es bueno», matiza.
El curso pasado la idea, también utilizada por otros clubes, permitió al equipo llegar con el depósito lleno a la hora de la verdad. Un momento que para el Celta ya ha llegado con el inicio de la segunda vuelta. El segundo entrenador no duda de que será mejor que la primera: «Pienso que en la segunda vuelta vamos a tener mucha mejora y vamos a sumar más puntos. Estoy muy convencido de ello. En Málaga el equipo estuvo muy bien tanto en ataque como en defensa».
Xosé Ramón Castro / La Voz de Galicia
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