Previa Celta - Betis: Lluvia de fútbol


RICARDO GROBAS

Día gris en Vigo. El temporal no cesa y la lluvia parece que dará la bienvenida a la Navidad. Lo bueno es que con agua el fútbol parece más fútbol, más puro, más verdadero. El frío y la sensación de humedad que produce un Balaídos mojado se compensa con el ingrediente épico que el líquido elemento proporciona al duelo. Si además, sobre el tapete se enfrentan dos románticos del balón, el espectáculo está servido.
   
Finalizada la resaca copera, el celtismo deposita su atención en el torneo de la regularidad. El sueño de eliminar al Real Madrid en el torneo del KO queda aparcado hasta el 9 de enero y todos los sentidos están puestos en recibir a un Betis que por fútbol y resultados merece el mayor de los respetos. El equipo verdiblanco, al que probablemente no aguarde un caluroso recibimiento en la ciudad olívica por la rivalidad labrada durante los últimos años, aspira a derrocar la fortaleza de Balaídos, donde sólo ha sido capaz de ganar el Málaga, y adentrarse en los puestos de Liga de Campeones. Máxima exigencia pues para un Celta que juega su enésimo boleto por la tranquilidad. Varias jornadas llevan los celestes persiguiendo ese triunfo que los distancie de la zona de descenso y los introduzca en la parte templada de la tabla.
   
El choque llega con problemas en la sala de máquinas celeste. Álex López, a pesar de regresar a los entrenamientos con sus compañeros, todavía no ha recibido el alta médica, mientras que Borja Oubiña no ha completado las últimas sesiones a causa de unas molestias musculares. No obstante, a tenor de las palabras de Paco Herrera, es posible que el capitán celeste pueda formar de inicio ante el conjunto sevillano. Lo que permitiría por tanto repetir el ya conocido 4-3-1-2, con Augusto Fernández y Michael Krohn-Dehli próximos al pivote y una dupla de arietes por delante con Mario Bermejo algo más retrasado.
   
De esta manera, y siempre confiando en la disponibilidad de Borja Oubiña, el Celta formaría con Javi Varas en la puerta y una línea de cuatro en defensa con Hugo Mallo, Cabral, Túñez y Roberto Lago. El capitán celeste actuaría como único mediocentro puro, escoltado por Augusto Fernández y Krohn-Dehli. Un poco por delante, Bermejo realizaría labores de mediapunta, con Iago Aspas y Park Chu Young por delante.
   
Por su parte, si en el Celta los problemas aparecen en la medular, en el Betis es la delantera la que trae de cabeza a Pepe Mel. Rubén Castro, Campbell y Juan Carlos arrastran problemas físicos, y si bien los dos últimos cuentan con opciones de jugar, el concurso del peligroso delantero canario en Balaídos es todo un interrogante. Dependerá de cómo evolucione, pero es el caso que más preocupa a los servicios médicos verdiblancos.
   
El Betis, un equipo caracterizado por el buen trato del balón y dirigido desde el centro del campo por un magistral Beñat, es de suponer que proponga en Vigo un fútbol ofensivo y vistoso, que choque frontalmente con la propuesta de los de Herrera, también atrevida y alegre. Se espera que salga de inicio con Adrián en la puerta y una defensa de cuatro con Chica, Paulau, Amaya y Nacho. Cañas y Beñat estarán en el doble pivote con Salva Sevilla en zona de tres cuartos. Por delante, Campbell y Juan Carlos ocuparán las bandas, mientras que si no se recupera Rubén Castro, Jorge Molina actuará como hombre referencia.
   
Jose Luis González González, del colegio castellano-leonés, dirigirá un duelo entre dos equipos mellizos en cuanto a propuesta futbolística. Los andaluces persiguen un triunfo que los adentre en zona Champions en la temporada de su confirmación en Primera. El Celta, todavía en fase de asentamiento, quiere cerrar un año casi perfecto en Balaídos con una nueva victoria que lo aleje de los puestos de peligro. Lloverá en Vigo a la hora del partido. Agua caerá seguro, fútbol y buen juego probablemente también.  



0 comments:

Publicar un comentario