![]() |
SARA EME |
Paco Herrera ejerció ayer de padre con Jonny Castro, el joven lateral del filial que está realizando toda la pretemporada con el primer equipo y que tiene muchas posibilidades de quedarse como suplente de Hugo Mallo. El de Matamá está quemando sus etapas como futbolista a gran velocidad, después de pasar del juvenil al primer equipo con una pequeña escala en el filial. En el club cuentan con él como uno de los grandes baluartes del futuro, y el empeño del chaval hace el resto. Herrera también parece haberse tomado a pecho, tal y como vimos ayer en el amistoso disputado en Barcelos.
El técnico catalán estuvo toda la primera mitad, el tiempo que jugó Jonny, haciendo indicaciones a su joven discípulo y corrigiéndole posiciones. Prácticamente se dedicó a seguir sus evoluciones, las de un futbolista que tiene unas maneras increíbles y que parece estar más que preparado para competir por una plaza en Primera División. Para ello, la ayuda del entrenador será fundamental, y eso que ayer no tenía la situación ideal para un lateral, con el banquillo celeste en tu banda y un entrenador que no es capaz de mantenerse en silencio.
Con todo, el de Matamá recogerá con cariño estas indicaciones si es inteligente, que lo es. Le servirán para aprender de cara al futuro, para mejorar y pulir esos detalles que la falta de experiencia te pueden dejar mal en alguna ocasión. El preparador barcelonés parece estar obsesionado con sacar de ahí un gran futbolista. Por otro lago, el apoyo de Herrera a Jonny contrasta con el escaso interés que aparenta mostrar en la evolución de Jota.
0 comments:
Publicar un comentario