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| JORGE LANDÍN |
Iago Aspas se marcha hoy a Ibiza. En esa ista mediterránea el delantero vigués agotará unas vacaciones que hasta ahora ha disfrutado en su Moaña natal junto a familia y amigos. "Tengo ganas de volver a entrenar para poder disfrutar de la Primera división y así ver cumplido el sueño de jugar con el Celta en la máxima categoría", mantiene.
En las últimas semanas, el nombre de Aspas se ha asociado con el posible interés de varios clubes de la Liga (Sevilla, Valencia) y algún extranjero. "Por mis características, yo no me veo jugando fuera de España, pues en muchos países el fútbol es demasiado físico. Estoy tranquilo, porque me debo al Celta, ya que tengo firmados tres años más y el club ya ha dicho que si alguién me quiere, tendrá que depositar los 10 millones de euros que figuran en mi cláusula", comenta. Aspas lo tiene claro: "Somos 20 jugadores y podemos quedarnos cortos. Necesitaremos dos o tres incorporaciones", mantiene.
Antonio Estévez / Marca
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