Se puede decir que el Celta disputa dos partidos este fin de
semana. El primero, el más importante, tendrá lugar a partir de las 18:00h de
hoy sobre el césped de la Nova Creu Alta, donde los de Paco Herrera rendirán
visita a un Sabadell experto en amargar la fiesta a los “cocos” de la
competición. El segundo, a más de 1.000 kilómetros de distancia, se celebrará
el domingo a las 20:00h en el estadio municipal de Riazor y enfrentará a
Deportivo y Valladolid, los dos grandes rivales de los celestes en la lucha por
el ascenso directo. Ganar en tierras
catalanas se antoja capital para meter presión al choque de la capital
herculina, donde a los olívicos les interesa el triunfo del eterno rival. Y es
que si los vigueses vencen al Sabadell y los pucelanos no consiguen la victoria en A Coruña, el Celta pasaría inmediatamente a depender de sí mismo, con lo que
ganando en Cartagena el próximo martes recuperarían la segunda posición.
Pero antes del
asalto a Cartagonova toca doblegar al conjunto arlequinado dirigido por Lluís
Carreras. El Celta llega a la localidad barcelonesa con varias bajas,
especialmente en el frente de ataque. Jonathan Vila y David se han quedado en
Vigo tratándose de sus respectivas lesiones, mientras que Borja Oubiña y Mario
Bermejo han viajado con el equipo aunque su participación en el encuentro de
esta tarde es seria duda. No tanto en el caso del centrocampista vigués,
prácticamente recuperado pero al que conviene no forzar, pero sí en el del
ariete cántabro, descartado totalmente para este sábado aunque con alguna
posibilidad de jugar el próximo martes. Por lo demás, se espera que Herrera
conceda descanso a un Quique De Lucas algo bajo de forma en las últimas
semanas, con lo que Toni gozaría de una oportunidad en el once. Joan Tomás y
Iago Aspas regresan a la titularidad y, por lo demás, no se esperan cambios en
el equipo titular.
De esta manera, los
vigueses saltarán a la Nova Creu Alta con Sergio en portería. En defensa, línea
de cuatro para Hugo Mallo, Oier, Túñez y Roberto Lago. Cristian Bustos y Álex
López formarán en el doble pivote justo por detrás del trío de mediapuntas
compuesto por Toni, Joan Tomás y Fabián Orellana. Arriba, como principal
referencia ofensiva, el máximo artillero celeste: Iago Aspas.
En frente espera el
Sabadell. De más a menos, los de Lluís Carreras buscarán una victoria que los
aleje definitivamente del descenso. Tras un inicio fulgurante, los catalanes se
han ido diluyendo poco a poco, aunque la renta obtenida a principio de campaña
les sirve de momento para no pasar agobios. Ganar al Celta significaría
enterrar cualquier tipo de fantasmas y asegurar un fin de temporada tranquilo.
Los arlequinados presentan tres bajas, dos de ellas en la retaguardia. Ni Pablo
Ruiz ni Manu Redondo podrán formar en defensa, mientras que el habilidoso
extremo Ezequiel tampoco ha entrado en convocatoria debido a un esguince de
tobillo. Por el contrario, recuperan a uno de sus centrales titulares, Jesús
Olmo, con molestias durante toda la semana.
Así pues, los
locales formarán con De Navas bajo palos. Línea de cuatro en defensa con Toni
Lao, Agustín, Olmo y Bermudo. Héctor Simón, Arteaga y Juvenal estarán en el
centro del campo, mientras que las posiciones de ataque serán ocupadas por
Lanzarote, Óscar Ramírez y Florian.
Al Celta sólo le
vale la victoria. Si el deseo es recuperar la segunda plaza, los de Paco
Herrera deben ganar en Sabadell y esperar un tropiezo del Valladolid en Riazor
para tomar la delantera a los pucelanos el próximo martes. Cada vez los errores
se penalizan más y un pinchazo en la Nova Creu Alta seguiría dejando a los
celestes a merced del equipo dirigido por Miroslav Djukic. Martínez Munuera dirigirá un choque en el que
los vigueses deberán refrendar su condición de favoritos al ascenso y doblegar a
un rival que ansía certificar cuanto antes la permanencia.
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