El Tenerife quiso a Jota en el mercado de invierno


Foto: Marta G. Brea
José Ignacio Peleteiro Ramallo (La Coruña, 1991) es una de las más firmes promesas del fútbol gallego. Ya lo era a los 14 años, cuando abandonó la disciplina de un modesto club municipal para enrolarse en el Celta. A sus técnicos les llamó tanto la atención que se afanaron en llevárselo como fuera, lo antes posible. Solo unas temporadas más tarde, nadie duda de que en unos meses dejará la categoría de bronce y dará el salto al balompié profesional. Hoy por hoy, es una estrella en Segunda B. "No es una pregunta para mí", replica con modestia cuando se le plantea por qué no está ya con el primer equipo. El caso es que solo la negativa de los dirigentes celestes evitó que saliera en enero con rumbo a otro equipo más relevante que el Celta B. Y su destino pudo ser el Tenerife. O un Segunda.

Jota, que así se le conoce, ha tenido varios pretendientes de división superior, pero en Vigo no le deja salir. El domingo juega con el filial celeste frente al representativo, que se planteó seriamente traérselo en el mercado de invierno. Cedido, claro. Pedro Cordero preguntó por él, y le dieron calabazas. "No sé, es un asunto que puse en manos de mi representante", puntualiza el atacante, de los más codiciados de Segunda B si se exceptúa a los del Castilla. Precisamente a los blancos los ve como el rival más fiero que tiene el Tenerife por el liderato. De su equipo, mientras, opina que "tal vez haya pasado factura" la inexperiencia del grupo, uno de los más jóvenes del campeonato.

Peleteiro, eso sí, hace hincapié en el mérito del partido que los suyos firmaron en Valdebebas, donde plantaron cara al primer clasificado. Al resto de aspirantes al ascenso los ve "parecidos" entre sí. Y en cuanto al Tenerife, encuentra normal que halle dificultades para encontrar regularidad y dar continuidad a un buen fútbol, pues en esta categoría "es complicado", apunta el ariete, uno de los máximos artilleros de la división de bronce. El año que viene, seguro, no estará en Segunda B. Entretanto, califica como "clave" el envite de este domingo en Barreiro, "un campo pequeño pero que está bien cuidado".

Tras cinco jornadas consecutivas sin ganar, el Celta B se lo juega casi todo ante los blanquiazules. Y hubo un día que el deseo de Cordero fue que Jota, talento a raudales, llegara a este partido luciendo la elástica del Tenerife. No pudo ser.

La Opinión de Tenerife 

0 comments:

Publicar un comentario