A estas alturas todos tenemos claro que el técnico catalán ha dado con la tecla, ha encontrado el estilo, la forma de jugar, e incluso me atrevería a decir que tiene ya su once.
Pero debemos recordar que quedan 22 partidos todavía para acabar la liga regular y, pese a que somos serios candidatos al ascenso directo, no hay que olvidar que la opción de disputar el play-off por el ascenso no es del todo descabellada.
A diferencia de lo que sucedía la temporada pasada, este año tenemos una plantilla muy compensada, con recambios de un nivel muy parecido a los titulares en todas las líneas. ¿Alguién duda de la sobrada capacidad de Catalá para sustituir a cualquiera de los dos centrales? ¿O de la de Bellvís en el caso de los laterales? Lo mismo sucede con Bustos, Insa, Toni, Joan Tomás, Jota… Y cabe recordar que es más que probable que, si finalmente disputamos las eliminatorias por el ascenso, necesitemos a cada uno de los integrantes de la plantilla a su máximo nivel.
¿Créeis que 15 minutos a la semana son suficientes para que jugadores como Toni o Joan Tomás estén enchufados caundo les toque jugar? ¿Créeis que un partido de cada 6 o 7 es suficiente para que Insa, Bustos o Catalá consigan la seguridad en sí mismo que les permita dar su mejor versión?
Obviamente, yo no soy entrenador, y se de la dificultad que entraña manejar una plantilla de 18 o 20 jugadores con sus respectivos egos y sus peculiares condiciones físicas y técnicas, pero quiero recordar a Herrera que una mala planificación de la temporada truncó el sueño del ascenso hace unos meses. No dejemos que nos ocurra lo mismo este año.
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