Más "Talentoni" que nunca

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Debo reconocer que Toni es una de mis debilidades desde que llegó al primer equipo de la mano de Eusebio en el verano de 2009. Por entonces, apenas había jugado en el juvenil, pero el técnico castellano vio en él lo que otros no le podían dar. Le dio confianza y llegó a jugar una decena de partidos con el primer equipo aquel año, con dos tantos incluídos, mostrando que además de clase, tiene un gran olfato de gol. La llegada de refuerzos para el ataque, Cellerino y Papadopoulos, le cerró el paso en el primer equipo y regresó al filial donde terminó el año con una decena de goles y siendo uno de los jugadores más importantes.

El paso natural de Toni era el ascenso al primer equipo. El club le hizo ficha y le dio dorsal de jugador del Celta a todos los efectos, pero la llegada de Paco Herrera frenó su progresión. Herrera no contaba con él, no jugó ni un solo minuto y ni tan siquiera entraba en las convocatorias. Toni pasó a tener un protagonismo totalmente residual en el equipo, y el paso lógico era una cesión para gozar de minutos en otro equipo.

Ahí apareció Onésimo, que practicaba en el Huesca un estilo similar al del Barcelona, ese en el que se había criado unos años antes Toni. El coruñés partió hacia el Alto Aragón con la ilusión de regresar hecho más futbolista. Gozó de minutos, tuvo oportunidades y demostró que podía ser un jugador válido en cualquier posición del campo. Finalizada la cesión regresó a Vigo con la mochila llena de experiencias que le deberían ayudar a hacerse un hueco en el Celta.

Y le costó. Y le sigue costando. Herrera no le acaba de dar toda la confianza, pero va encontrando más minutos que el año pasado. El pasado viernes fue titular por segunda vez en lo que va de Liga y mostró todo lo que muchos esperábamos de él. Toni fue en El Collao más "Talentoni" que nunca. El coruñés aprovechó la ausencia de De Lucas por sanción para ser titular y lograr que no se notase la ausencia del barcelonés. Fue, probablemente, el mejor del partido, tomó la responsabilidad que el talento le otorga y solo le faltó el gol para rematar una gran actuación. Y lo rondó en un par de ocasiones, mostrando esa zurda de seda que posee.

Toni tiene sitio en este equipo. Eso ya lo sabíamos, pero además ahora hay pruebas gráficas de ello. Pero no solo por la derecha, donde juega a pierna cambiada, sino también por la izquierda o por el centro, actuando como mediapunta, tal vez su posición más natural. Parece que el huesca lo vuelve a querer, pero este año su salida no es viable ya que Toni es necesario para este equipo. El futuro (y el presente)  está en las botas de Toni y compañía. No lo desaprovechemos.