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| Foto: Cristina Abadía / Marca |
Varios eran los nombres que estaban en carpeta, pero uno de los preferidos siempre ha sido el punta Carlos Aranda. El Hércules está a la espera de que el jugador logre desvincularse del Levante, con el que tiene contrato hasta el 30 de junio con una cláusula de renovación automática por partidos.
Los blanquiazules, en ningún caso, debido a su delicada situación económica, pueden pagar traspaso por el delantero, por eso la operación sólo será posible si el jugador logra la carta de libertad. El objetivo es que incluso esta misma semana, si todo va según lo previsto, Aranda se incorpore.
La operación está en marcha y la clave pasa por la negociación entre el delantero y el club granota. Si el Levante le deja salir, Aranda se convertiría en el primer refuerzo del Hércules en el mercado invernal. La negativa de Koné a jugar la Copa de África parece cerrar a Aranda el camino de la titularidad en el conjunto de Juan Ignacio Martínez y aumenta las opciones de que el jugador presione para poder salir del conjunto del Ciudad de Valencia.
El Hércules quiere ser siempre totalmente respetuoso en la negociación. Sólo si Aranda está libre, afrontará la contratación del delantero, ya que en ningún caso pueden exigir nada al Levante, pues no están en condiciones de pagar traspaso. La gran duda que hay desde Alicante es que el Levante no deje salir a Aranda hasta que incorpore a otro efectivo en su lugar para el ataque y eso demore la operación.
El acuerdo entre el delantero y el Hércules parece fácil, siempre que quede libre. En el club alicantino esperan con cautela, pero no descartan que los acontecimientos se precipiten y se concrete el fichaje antes del jueves e incluso pueda estar a disposición de Mandiá para el partido del próximo domingo en Chapín.
Gonzalo Blanes / Marca
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