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Foto: Denis Doyle / Getty Images
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Iago Aspas ha vivido dos temporadas dentro del mismo curso, marcado por la lesión que le tuvo fuera de los terrenos de juego entre enero y febrero. Esa dolencia marcó un antes y un después en su participación en el equipo, y parece haberle llevado a otra etapa en su carrera deportiva, cuyo final se ve cada día más cerca por mucho que nos resistamos a asumirlo.
Antes de la lesión sufrida en El Sardinero, durante el partido de Copa con el que el Celta abrió el año ante el Racing de Santander, Aspas solo se había perdido el partido ante el Real Madrid por la sanción que arrastraba tras su expulsión una semana antes en Las Palmas, y había sido suplente por unas molestias en el partido ante la Real Sociedad.
En esa primera fase de la temporada, Aspas disputó 16 partidos, 14 de ellos como titular. Solo fue suplente ante el Villarreal, con muchas rotaciones, y frente al Girona, otro partido con rotaciones ya que venía de ser titular ante el Atlético de Madrid tres días antes. Después de la lesión, no tuvo minutos ante el Betis, aunque estuvo en el campo, también por unos problemas físicos, y a partir de ahí ha participado en los 11 encuentros del Celta, pero solo ha partido de inicio en 4 de ellos, mientras que en los otros 7 salió desde el banquillo.
En los últimos 11 encuentros tras la lesión, solo ha salido de inicio en 4, lo cual denota un claro cambio de rol del moañés en el equipo. Sorprende que después de tantos encuentros siga sin entrar en el once inicial, y cuente con tan pocos minutos, aunque su irrupción en los encuentros ante Villarreal y Real Madrid fue espectacular.
La irrupción de Fer López, y el irremediable paso del tiempo pueden ser las causas, aunque ha habido partidos en los que ni él ni el canterano salieron de inicio. Claudio Giráldez mueve mucho al equipo, no es habitual que repita alineaciones, y elige a sus futbolistas en función del rival, teniendo en cuenta incluso que jugadores pueden dar un salto de calidad al equipo en la segunda mitad. Gusta de guardarse balas para los finales de los partidos, y parece que le empieza a gustar tener a Aspas fresco e inspirado para las segundas partes.
Y el moañés sigue respondiendo como solía, incluso en un rol que le resulta totalmente desconocido en su larga etapa en el club. En lo que llevamos de temporada acumula 9 goles y 4 asistencias. Muy buenas cifras para un jugador al que los datos excelentes siempre le ha acompañado. Incluso en esta nueva fase de la temporada, con muchas suplencias, acumula 3 goles, todos desde los once metros, y una asistencia. Veremos cuál es su papel en esta recta final.
